Para qué quedarme
en esta casa desierta donde tú
has estado.
Sin sonrisas que me abracen.
Dibujo círculos con los dedos
en el polvo añejo
de la mesa
-todo es pasado-
y me concedo un último deseo;
El beneficio de la duda.
No me sirven las verdades
si son certezas,
prefiero el desatino
de las torpes palabras
cuando brotan malheridas desde mi garganta.
Mi dedo sigue dibujando círculos
sin hallar un camino.
Líneas que acaban siempre
donde está el inicio…
De nuevo,
todo empieza, y nada cambia,
el hecho
de que ya no estés conmigo.
©Yolanda Gutiérrez Martos 2010
2 comentarios:
La soledad, el silencio, el paso del tiempo, un montón de cosas salen de tu bella poesía. Me ha gustado.
Hola Yolanda, bueno ahora me uno a tu blog. ¿Me recuerdas?. Bueno entra en mi blog. Espero que sí.
Un saludo. Estefanía
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